lunes, 5 de febrero de 2007

Romance de una noche

Ahora mi mente se desliza y transita por mi ser, no me permite volver a recorrer, es la misma que se encuentra en mis venas, por mis ojos, entre mi ser, no me deja vivir, me arrumba y revuelca entre las entrañas de mi pensamiento, y es asi como se desliza sobre las nubes, ya el ocaso es sangriento, con sopor respira el sol en su huída, con tristeza alegra la luna esta noche intranquila, suave respirara de un último aliento de un astro más que se va, se esconde entre el horizonte, jadeante por un ultimo ser, por volver a nacer, no vuelve, no vive sin su luna amada, que abandona con cada hora que pasa, viviendo la maldición de una noche de ensueño, quiere ser y no puede descubrir, la vida misma en un suspiro, que se acaba con la hastía noche, y es tan solo un segundo el que vislumbra, a través del reflejo en las olas del mar, eterno amante de sol y mar, que todo ahora es falsedad, redundancia entre palabras refinadas que no desean morir, que no quieren vivir, es solo el cálido reflejo de un amor de medianoche, de un romance al atardecer, un sueño que no desea terminar, tan frágil como la brisa de verano, y tan tenué como el color del cielo, viajando entre las cuervas de este mar de asfalto se encuentra, la vida misma entre un dulce encanto, maldito hechizo que ha dejado esta tierra sin aliento, dame oh cielo santo, un respiro de mi soledad, una caricia a mi ansiedad, es por eso que hoy lloro, con sangre entre mis ojos, con dolor entre mi mirar, es por eso que hoy vivo soñando, tal vez con un día menos, tal vez con uno más, a fin de arreglarlo todo, tal vez será una eternidad, pero si mil años no importan, si cien soles pasaran, es mi ser que hoy te escribe, a ti y nada más, sopla en mi oh dulce mía, dame vida nada más...

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